Cuatro de los nueve fallecidos tras volcar la patera ya han sido identificados

Las prácticas forenses realizadas en la clínica del Palacio de Justicia de Lanzarote y el trabajo del Juzgado de Instrucción Nº3 de Arrecife, que investiga lo sucedido, así como de efectivos de la Guardia Civil en estrecha colaboración con el Consulado de Marruecos en Canarias han permitido la identificación, hasta el momento, de cuatro de los nueve inmigrantes marroquíes que perdieron la vida en el mar tras zozobrar la patera en la que viajaban a Lanzarote en la madrugada del pasado seis de noviembre, en una zona rocosa y de difícil acceso en el tramo de costa entre Soo y Caleta de Famara, en el municipio de Teguise.

Todos los fallecidos son varones y entre las personas identificadas hay una nacida en 1982, otra en 1992 y dos en 1996, aseguró ayer el cónsul de Marruecos en Canarias, Ahmed Moussa, por lo que tienen edades comprendidas entre los 23 y 37 años.

Procedían de la región de Nador, situada a unos 15 kilómetros de la ciudad de Melilla, precisó el cónsul marroquí. Añadió que los cuerpos aún no han sido repatriados. "Se hará lo que decidan los familiares", aseveró Moussa, en el sentido de darles sepultura en su país o en Lanzarote.

En el cementerio de Teguise existe un lugar de enterramiento para las personas musulmanas, camposanto en el que ya hay enterrados fallecidos que profesaban el islamismo.

Aún restan por identificar otros cinco indocumentados debido a la lentitud de los trámites para llevar a cabo esta ardua tarea. "Se van buscando las alternativas si falla un procedimiento hasta lograr dar con la identidad", detalló el cónsul.

Moussa agradeció "el excelente trabajo" realizado por la Guardia Civil así como por los profesionales de la Justicia para llevar a cabo los reconocimientos de los ahogados.

Hasta ahora solo un ciudadano que ha dicho ser familiar de uno de los muertos se ha puesto en contacto con el Consulado de Marruecos y otros lo han hecho con la Benemérita. Cuatro de los cuerpos se recuperaron horas después del naufragio y cinco al día siguiente, el siete de noviembre.Prudencia y precisión

Las labores para saber quiénes son las restantes víctimas continúan, aseveró el representante consular de Marruecos en el Archipiélago. "Hay que ser muy prudentes y precisos en la identificación para que no se produzcan errores", advirtió Moussa. De ahí la intensa colaboración entre el consulado, la Guardia Civil y el personal judicial.

El deterioro de los cuerpos por los golpes sufridos contra las rocas debido a la fuerza del mar, con olas de hasta tres metros, dificulta la identificación.

De esta nueva tragedia de la inmigración en Lanzarote hay cuatro supervivientes, todos hombres, que alcanzaron a pie el pueblo de Caleta Caballo, a unos tres kilómetros de donde se produjo el vuelco de la embarcación, sobre las ocho de la mañana del seis de noviembre tras una noche infernal en la que perdieron a nueve de sus compañeros de travesía entre Agadir y Lanzarote. Vecinos de Caleta Caballo facilitaron alimentos y ropa a los que lograron salvarse hasta que llegaron Cruz Roja, Emerlan y los efectivos de seguridad.